¿Saben por qué el asesino de Noruega es diferente de los otros? Yo se los voy a decir y les voy a decir qué cosas ningún medio de comunicación nos van a decir jamás sobre él. Este hombre se llama: Anders Behring Breivik, es el noruego de 32 años, que asesinó a casi 100 personas hace unos días en la isla de Utoeya en Noruega, es un cristiano conservador de extrema derecha que odia a los musulmanes. Y aunque al principio varios medios afirmaron que el ataque había sido realizado por musulmanes y países como USA se rasgaron las vestiduras diciendo que iban a enviar toda la ayuda posible a Noruega para atrapar a los autores de la peor masacre que se haya visto en ese país desde la Segunda Guerra Mundial, por ahora se sabe que el tipo ¨anti-sistema¨ actuó solo. De ahora en adelante, no veremos a los medios restregándonos en la cara el credo religioso del asesino, ni le achacarán a la religión sus ideas extremistas. Llevará un juicio completamente justo y lo más seguro es que terminará sus días en un hospital mental porque sitios como Guantánamo no han sido confeccionados para rubios de ojos celestes con sangre europea. Ningún miembro de la familia de este hombre será perseguida ni su país invadido por matar a inocentes, nadie osará usar métodos de tortura como el ¨submarino¨ para lograr una confesión y hasta es muy posible que después de cientos de psicoanálisis nos hagan creer que debemos tenerle lástima, y su película será premiada con un Oscar de la Academia después de haberse convertido en un Best Seller. No escucharemos jamás una disculpa a los musulmanes por endilgarnos el ataque de ¨gratis¨ y dentro de unos días esta noticia será sólo un ¨desliz¨ y un motivo más dentro de la magnífica Comunidad Europea para que traten de unirse más que nunca en contra los terroristas de turno. En Noruega este patriota asesinó a 100 y es la peor tragedia desde la Segunda Guerra Mundial, en cambio los muertos de Libia, Siria, Bahrein, Afganisthán y Pakistán, son sólo daños colaterales. Èsos no cuentan en estas listas de tragedias. La pobreza en Somalia está aniquilando a su población fomentada por países que se los han parasitado y después ¨se mudan¨ a otros con todos los recursos explotables para fagocitárselos. Mientras tanto, seguirán sembrando vientos y continuarán cosechando tempestades. Quiero aclarar que yo jamás justificaré el asesinato de ningún inocente, lo que he querido subrayar, son las "pequeñas grandes" diferencias con que será tratado este caso. Leer los detalles y observar las imágenes todavía me tienen en shock, pero no menos que los niños asesinados a diario por la OTAN, USA o cualquier otra fuerza creada para justificar el crimen. Nada justifica la muerte de seres inocentes. Rashida Jenny Torres Musulmana Costarricense.