25 nov 2009

La oscuridad de la noche -- Mexico DF

La noche del sábado 10 de octubre del 2009, mientras el pueblo mexicano celebraba su clasificación al mundial, policías federales y elementos del ejército tomaron las instalaciones de Luz y Fuerza del Centro (LFC), organismo descentralizado encargado del suministro de energía eléctrica en el centro del país. Una hora después de la toma, al filo de la medianoche, el gobierno federal publicó un decreto extraordinario en el que se establecía la extinción de la compañía, el argumento que dio fue simplemente que esta “ ya no resulta conveniente para la economía nacional ni para el interés público”. La decisión de desaparecer LFC fue justificada por el gobierno como una medida en respuesta a la ineficiencia de su servicio y como respuesta ante la crisis económica del país.


Con este decreto el presidente Felipe Calderón Hinojosa, cuyo lema de campaña electoral fue “presidente del empleo” dejaba sin trabajo a 44 mil trabajadores y sus familias. El gobierno ofreció a los trabajadores que aceptaran su liquidación antes del 14 de noviembre una compensación adicional con lo que buscaban romper la unidad del sindicato y del movimiento social que se gestó entorno a esta medida. De forma paralela se lanzaron una serie de comerciales en radio y televisión para desprestigiar LFC y justificar la medida del gobierno, así como para asediar a los trabajadores para que aceptaran su liquidación.

La desaparición de LFC significó además un terrible golpe a la historia de lucha sindical, apunto de cumplir los cien años el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) constituía uno de los pocos ejemplos exitosos en materia de conquistas laborales en México. La apuesta del gobierno con esta medida es que se los empleos sin ninguna prestación se conviertan en la regla general. Martín Esparza, secretario general del SME afirma que atrás de la desaparición del LFC está el interés de privatizar el sector eléctrico. La compañía había presentado al gobierno una solicitud para la concesión de una red de fibra óptica con la que podrían haber entrado en el negocio de las telecomunicaciones que están bajo el monopolio de Carlos Slim. La concesión les fue negada porque, a decir de Esparza, el negocio ya estaba comprometido a capitales privados.

Ante este escenario los trabajadores del SME y varias organizaciones han realizado manifestaciones masivas para dar marcha a atrás al decreto, sin embargo como es costumbre en México el gobierno ha hecho caso omiso a estas demandas y ha respondido de manera hostil. Aún así las movilizaciones continúan y se anuncia incluso la posibilidad de una huelga nacional.
Anelí Villa Avendaño
Historiadora - Fotografa - Maestra
El Papel - Mexico DF

1 comentario:

  1. Esto tendrá algo que ver con que Calderón haya llegado a Guatemala para la interconexión de energía entre los dos países? Esto fue a finales de octubre.

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